La inteligencia artificial en medicina: lo que veo en mi día a día

Hace unos días, charlando con mi compañero del trabajo (también escribe para esta web a veces), me comentaba lo mucho que ha cambiado todo en los hospitales en los últimos años. Y tenía razón, ¡vaya si la tenía! Yo no soy médico ni trabajo en sanidad, pero mi hermana sí, y entre lo que ella me cuenta y mi propia experiencia como paciente, me he animado a escribir esto.La medicina siempre va avanzando, eso lo sabemos todos, pero lo que está pasando ahora con la inteligencia artificial… uff, es otro nivel. No es solo que haya máquinas nuevas, es que están cambiando completamente cómo se hacen las cosas.

Lo que me contó mi hermana (que es enfermera en La Paz)

Mi hermana Sara lleva 12 años trabajando en el hospital. El otro día, mientras cenábamos en casa de mis padres (hacemos cena familiar los jueves, una tradición desde que éramos pequeños), nos contó algo que me dejó flipando.

«Mira, Jorge, ¿te acuerdas de la señora Martínez, la vecina del 5º? Pues vino a urgencias la semana pasada. Le hicieron una radiografía y el sistema nuevo, ese con IA que instalaron hace poco, detectó algo raro que los médicos no habían visto a primera vista. Era una pequeña mancha en el pulmón derecho, nada obvio.»

Lo increíble es que ese «algo raro» resultó ser el principio de una neumonía. La trataron antes de que empeorara y la señora Martínez ya está en casa, recuperándose.

«Antes», me explicó Sara mientras se servía más ensalada (siempre fue la más sana de la familia), «hubiera sido fácil pasarlo por alto hasta que los síntomas fueran más graves».

Cuando me operaron de la rodilla

Bueno, y ahora mi propia experiencia. El año pasado me rompí el ligamento cruzado jugando al fútbol con los amigos. Ya se sabe, a los 40 uno ya no es el chaval que era… Pero vamos al grano.

Cuando entré al quirófano estaba cagado de miedo, no lo voy a negar. El cirujano, el Dr. Ramírez, me explicó que iban a usar un sistema robótico guiado por IA para hacer parte de la operación.

«Es como tener un asistente con superpoderes», me dijo. «Yo controlo todo, pero él me ayuda a ser más preciso».

Después de la operación, durante la rehabilitación, también usaron un sistema con sensores que analizaba cómo caminaba. Recuerdo que un día el fisio me dijo: «Estás compensando demasiado con la otra pierna, aunque creas que caminas normal». El sistema había detectado un patrón que ni yo mismo notaba.

Lo bueno? Me recuperé en 4 meses en vez de 6. Lo malo? Todo ese rollo de tener sensores pegados al cuerpo me daba un poco de grima, jajaja. Y claro, mi recuperación rápida también tuvo que ver con que soy un cabezota y hacía los ejercicios TODOS LOS DÍAS, no solo cuando me tocaba rehabilitación.

No todo es color de rosa

Tampoco os penséis que esto de la IA en medicina es todo maravilloso. Mi cuñado es médico de familia en un pueblo de Toledo, y allí ni huelen estas tecnologías. La brecha entre hospitales grandes y pequeños centros de salud es ENORME.

«Aquí seguimos con el fonendo y poco más», me dijo la última vez que nos vimos. «Esas maravillas que cuentas están muy bien, pero aquí necesitamos cosas básicas antes que robots».

Y tiene toda la razón del mundo. ¿De qué sirve tener superordenadores en Barcelona o Madrid si en muchos pueblos ni siquiera hay médico todos los días?

Otro tema que me preocupa… ¿qué pasa con nuestros datos? Mi madre, que es una señora de 70 años muy lúcida pero desconfiada con la tecnología, siempre me pregunta: «¿Y toda esa información personal quién la guarda? ¿Quién garantiza que no acabe donde no debe?». Y francamente, no sé qué responderle.

Cosas que me sorprendieron

El mes pasado acompañé a mi tía Pilar (la hermana pequeña de mi madre) a una consulta con el neurólogo. Tiene migrañas desde hace años, probando mil tratamientos sin mucho éxito.

Pues bien, el médico le mostró en la pantalla un modelo que había creado la IA con sus datos: patrones de sueño, alimentación, clima, niveles de estrés… todo cruzado con sus episodios de migraña.

«Mire, señora», le dijo, «según esto, sus migrañas empeoran significativamente tres días después de comer quesos curados y cuando duerme menos de 6 horas».

Mi tía se quedó a cuadros, porque ella nunca había relacionado el queso con las migrañas, pensaba que era el vino (que también influye, pero menos de lo que creía).

Lo más gracioso? Cuando salimos de la consulta me dijo: «Quillo, este médico es un fenómeno, se ha dado cuenta de algo que llevo años sin ver». No entendió del todo que fue el sistema, no el médico, quien encontró el patrón. O quizás sí lo entendió pero prefiere pensar que fue el médico. A veces la gente mayor se siente más cómoda así.

Lo que pienso yo de todo esto

Me parece que estamos viviendo un momento histórico en la medicina, comparable a cuando se descubrieron los antibióticos o las vacunas. PERO (y es un pero grande como una casa), no podemos olvidar el factor humano.

El otro día, cuando estaba con gripe, llamé al médico por teléfono. Me atendió una grabación que me hizo un montón de preguntas para «evaluar mis síntomas». Al final, el sistema determinó que no necesitaba atención urgente.

El problema? Me sentía fatal y lo que necesitaba era que alguien me dijera «tranquilo, tómate esto y verás cómo mejoras». Un simple «no te preocupes» que ninguna máquina te puede dar igual que una persona.

Creo que ahí está la clave: usar la tecnología para lo que es buena (analizar datos, encontrar patrones, ser precisa) y dejar a los humanos lo que hacen mejor (empatía, comprensión, esa intuición que viene de años de experiencia).

Para terminar…

No sé vosotros, pero yo me alegro de vivir en esta época. Mi abuelo murió de algo que hoy sería fácilmente detectable con estas tecnologías. Y aunque a veces me asusta un poco tanto avance (soy de los que piensa que hay que ir con cuidado), creo que al final nos beneficiará a todos.

Eso sí, tenemos que estar atentos y exigir que estos avances lleguen a TODO EL MUNDO, no solo a los hospitales grandes de las capitales.

Y vosotros, ¿qué pensáis? ¿Habéis tenido alguna experiencia con estas nuevas tecnologías en la consulta del médico? Me encantaría leer vuestros comentarios.

PD: Perdonad si el artículo ha quedado un poco desordenado. Empecé a escribir con una idea y he acabado con otra completamente distinta. Ya sabéis cómo es esto de ponerse a escribir cuando uno tiene tantas cosas en la cabeza… 😅

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